Cabeza de Buey
Antecedentes
Dentro del Programa de Investigación Sistemática de Recursos Minerales se planteó el pasado año 1989 la revisión de los trabajos realizados por la Junta de Energía Nuclear durante los años 60 y 70 sobre las cuarcitas rutilíferas y circoníferas de Despeñaperros (Santa Elena). Esta iniciativa se apoyó en tres razones que fueron consideradas válidas.
a) Los mercados de titanio y circonio están en demanda desde hace años y las previsiones no cambian la tendencia alcista. La Comunidad Europea no tiene producción y sí un alto consumo para sus industrias transformadoras. Las tierras raras incluídas en las
monacitas (tercera mena de estas cuarcitas) añaden valor a su explotación.
b) Las tecnologías de molturación, prefragilización y separación gravimétrica y por flotación de finos han evolucionado.
c) Todos los estudios realizados hasta ahora, lo han sido utilizando como mena una capa de cuarcita de Santa Elena extraordinariamente dura y silicificada. En el desarrollo de trabajos de otro proyecto SISTEMINER (Reserva de Sb de «Almuradiel») se puso de manifiesto que otros niveles muy inferiores al citado en la escala geológica y encajados en la formación denominada «Alternancias de Pochico» eran
portadores de valores similares de rutilo, circón y monacitas y podrían ser económicamente más tratables por no presentar silicificación.
La importancia del descubrimiento de estas nuevas monacitas de europio, así como el extraordinario interés de los resultados obtenidos en los trabajos realizados este año 1990, han aconsejado separar el proyecto de la Reserva de Cabeza de Buey en dos fases. La primera tiene como objetivo la investigación de las metareniscas de Rutilo y Circón, primero y único de los objetivos planteados el pasado año, y la segunda se refiere a los trabajos de investigación de la monacita de europio o monacita gris.
Conclusiones
Las conclusiones que se han ido obteniendo a lo largo de los epígrafes de este informe y que quedarán ya como premisas de cualquier tipo de acción que se planifique en el futuro, son las siguientes, por el orden mismo del informe:
– Del estudio geomorfológico-morfométrico se diferencian en la Reserva Cabeza de Buey dos grandes áreas separadas por una discontinuidad estructural más o menos E-W definida por el anticlinal-Sierra de Santa María-Cerro de Golondrinas-Sierra del Cambrón, de muy diferentes características:
I. La zona Norte con grandes llanuras y aparente tranquilidad tectónica, con amplio desarrollo de mantos detríticos sin grandes contastres de relieve es favorable para la formación de grandes aureolas mecánicas de dispersión de elementos pesados.
II. La zona Sur: de grandes contrastes de relieve y enérgica actividad erosiva, con valles estrechos y escarpados no es favorable
– De la comprobación de las recomendaciones de este estudio, en el que se supone que todas las pizarras negras son portadoras de monacitas, se deduce, a falta de una ratificación de más detalle, que la posibilidad de existencia de concentraciones importantes en la zona sur es muy lejana y que en la zona norte tan solo existiría el gran aluvión de Cabeza de Buey, prolongando hacia el oeste hasta casi Santa Cruz de Mudela.
– Efectivamente en esta área se pone de manifiesto una prolongación del paleocauce de Cabeza de Buey hasta las cercanías de Santa Cruz de Mudela, señalándose una zona de muestras ricas en superficie que sobre un total de 17 dan una ley media de 750 gr/m3 de monacita.
– La investigación realizada en la red hidrográfica y cauces en los que está actuando la dinámica aluvial reciente y actual, pone de manifiesto que en efecto esta dinámica está erosionando, y robando valores del paleoyacimiento y está redepositando en su camino y a favor de trampas típicas y tanto en el cauce actual como en las terrazas pleistocénicas importantes bolsadas de aluviones muy enriquecidos, que también pueden ser explotados. Se determinan las áreas de cauce de terraza que podrían ser interesantes y se supone un potencial de al menos 10.000 t de monacita, que debe de ser investigada por pocillos. Hay concentraciones hasta de 19,75 kg/m3 (J- 34) en superficie.
– En la evaluación que se realiza del yacimiento, solo en sus vertientes norte y oeste (hasta cerca de Torrenueva) sobre una superficie de 3.125 hectáreas sobre 500 pozos con malla de 250 metros en geometría cuadrada, realizada por cuatro métodos diferentes (dos· por parte de ENADIMSA y dos por parte del IMGRE) con resultados aceptables, por comparables sin diferencias excesivas, se puede considerar como media algo conservadora que los potenciales totales obtenidos son, para una ley de corte de 500 gr/m3 , 46.500 te monacita gris.
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Navas de Estena
Antecedentes
En noviembre del año de 1990 el Subdirector del Instituto de mineralogía, geoquímica y cristaloquímica de elementos raros (IMGRE, Moscú, URSS) – A. A. Kremenetski en calidad de experto científico-técnico visitó por lo invitación de las firmas ADARO y MAYASA la región del curso superior del río Estena en acompañamiento de los geólogos de la firma MAYASA.
Por los resultados de los itinerarios conjuntos realizados en diferentes lugares de la región investigada fueron confeccionados los tres cortes geológicos esquemáticos, además tomando las 35 muestras de rocas primarias.